La representante de las víctimas de La Cantuta, Gisela Ortiz, afirmó hoy que es “difícil” pensar en un indulto a Alberto Fujimori mientras continúen desaparecidas cinco personas de este caso a manos del grupo paramilitar Colina.
Gisela Ortiz, representante de los deudos de La Cantuta.
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Agregó que el asesinato de nueve estudiantes y un profesor de la Universidad La Cantuta, en 1992, fue uno de los casos por los cuales el exmandatario (1990/2000) fue sentenciado a 25 años de cárcel por delitos de lesa humanidad.
“En el caso Cantuta tenemos cinco desaparecidos que hasta ahora, no solo los miembros del grupo Colina, sino también Fujimori, no han facilitado información para recuperar sus cuerpos. Es bien difícil pensar en un indulto o en alguna forma de perdón, cuando ni siquiera hemos podido tener los restos de nuestros familiares”, declaró.
Deploró, en ese sentido, la difusión pública del autorretrato de Fujimori, presentado por sus seguidores como expresión de pesar por los abusos perpetrados en su gobierno, al considerar que ni siquiera pide un perdón expreso por los delitos que cometió.
Como hermana de Luis Enrique Ortiz Perea, uno de los estudiantes asesinados, Gisela recordó que durante todo el proceso judicial, en ningún momento ni Alberto Fujimori ni su familia fueron capaces de reconocer la gravedad de los crímenes.
“Realmente no espero que Alberto Fujimori pida perdón ahora. Mi familia y yo creemos en el derecho a la justicia, en la sanción impuesta por el Poder Judicial y la Corte Suprema por la muerte de mi hermano”, sostuvo.
Por ello, expresó su confianza en que el presidente de la República, Ollanta Humala, respete esa decisión judicial y respete el derecho a la justicia que les asiste a los familiares de las víctimas del caso La Cantuta y Barrios Altos, al momento de resolver el pedido de indulto.
Ortiz, actual activista de derechos humanos, afirmó que los deudos apuestan por una reconciliación sincera y respetuosa a la memoria de sus familiares.
“Parte de esa apuesta tiene que ver con la identificación de los responsables de todas estas violaciones a los derechos humanos, y que los familiares pudiéramos acceder a la verdad y a ese derecho a saber qué fue lo que pasó, quiénes son culpables de esos crímenes, individualizar a los responsables”, comentó.
Reconoció que en el caso La Cantuta se ha logrado avanzar, pero lamentó que en el país hay cientos de casos que aún no se ha logrado la justicia.
En ese sentido, alertó en Canal N que la impunidad perpetúa esa distancia entre los peruanos, en sentirse resentidos y dolidos todavía, cuando no se da paso a la justicia como forma de reconciliación.
“Por ello, pedimos que nos devuelvan los restos de nuestros familiares que aún siguen desaparecidos, nadie podrá voltear la página sabiendo que su ser querido está enterrado en una fosa clandestina como si fuera un animal”, anotó.
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