La Mesa
Técnica Regional de Sacha Inchi organizó un taller de capacitación en
elaboración de derivados de este producto para generar mayores ingresos y
mejorar la calidad de vida de los productores locales con actividades
sostenibles y eficientes.
Sacha inchi.
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Dicho evento contó con la participación de 43 productores socios de la
Asociación Provincial de Productores Agrarios Santa Cruz (APPA) y de la
Asociación Agrícola Ecológica de Sacha Inchi El Dorado (AAESIDO).
La capacitación permitió dar a conocer cómo se elaboran algunos derivados del sacha inchi, como bebidas proteicas, croquetas, kekes, mantequilla y snacks.
Para la organización de esta capacitación, que se llevó a cabo en la provincia de El Dorado, la Mesa Técnica Regional de Sacha Inchi recibió el apoyo de las instituciones que la integran, como el Gobierno Regional de San Martín.
En dicho taller se resaltó la importancia de elaborar derivados de este producto para contribuir a mejorar la economía de las familias de los socios de las organizaciones, a consecuencia de la ampliación de la frontera agrícola de este cultivo.
Con ello también se ayuda a disminuir el déficit de carencias de proteínas y a promover su consumo a nivel local, regional o nacional y así reducir el desbalance nutricional, principalmente, en la población vulnerable (niños, madres gestantes y adultos).
Nutricionalmente, el sacha inchi posee propiedades funcionales que lo ubican como un alimento nutracéutico, destacando en él las vitaminas A y E, así como ácidos grasos esenciales, que son buenos en la salud de los consumidores.
La capacitación permitió dar a conocer cómo se elaboran algunos derivados del sacha inchi, como bebidas proteicas, croquetas, kekes, mantequilla y snacks.
Para la organización de esta capacitación, que se llevó a cabo en la provincia de El Dorado, la Mesa Técnica Regional de Sacha Inchi recibió el apoyo de las instituciones que la integran, como el Gobierno Regional de San Martín.
En dicho taller se resaltó la importancia de elaborar derivados de este producto para contribuir a mejorar la economía de las familias de los socios de las organizaciones, a consecuencia de la ampliación de la frontera agrícola de este cultivo.
Con ello también se ayuda a disminuir el déficit de carencias de proteínas y a promover su consumo a nivel local, regional o nacional y así reducir el desbalance nutricional, principalmente, en la población vulnerable (niños, madres gestantes y adultos).
Nutricionalmente, el sacha inchi posee propiedades funcionales que lo ubican como un alimento nutracéutico, destacando en él las vitaminas A y E, así como ácidos grasos esenciales, que son buenos en la salud de los consumidores.
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